Prefiero mi verdad

Ni el gritar, ni el recelo de tu rabia

agravia el corazón de mi tintero,

prefiero mi verdad sin tu pantalla.

Detesto tu cariño traicionero,

mas quiero revelar el horizonte

perdida en el desmonte de unos versos.

Me quedo con el trino del sinsonte,

del monte, el arrabal y la vereda

que enreda mis memorias desde entonces.

Y trae ese valor que no se hereda

y hospeda lo sagrado, lo valioso,

grandioso en el placer de la sorpresa.