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Mostrando entradas de enero, 2020

En tanto el corazón

En tanto el corazón es quien predice, quien mira desde el alma al universo, quien besa la esperanza en su revuelo y justo persevera en sus raíces. Genuino en el andar y entre sentires, se entrega a la batalla por la vida y ofrece su verdad mientras se empina valiente, apasionado, justiciero, dejando la constancia de su credo pues sabe del amor que no claudica. Pues sabe del amor que no claudica, que lucha intensamente en el respeto moviendo el sentimiento más honesto sin sombras de angustiosas despedidas. Auténtico el hacer que lo motiva, dichoso en su bregar siempre se crece, alienta en su templanza sus deberes y cumple el compromiso sin censuras atento a esa verdad que con mesura exorna la virtud completamente.

Es la verdad ( Soneto con Estrambote)

Presume su beldad inspiradora,  acerca la razón en su albedrío, disfruta cada nuevo desafío y enfrenta la batalla arrolladora. No juzga como simple espectadora, se entrega apasionada en el estío, transforma la oquedad que en el hastío conmueve en la nostalgia de la aurora. Y busca en el arcén de aquel consuelo el margen que responda a la caricia, que sabe del amor y su revuelo. Exilia  la maldad de la codicia, aquella que consume en el desvelo y encuentra en el milagro la justicia. Ya ves es la verdad la que propicia lo ilustre, lo supremo que bendice, en tanto el corazón es quien predice.

Ante tu imagen majestuosa

Inspirada en la imagen del Salto Ángel, en Venezuela, El Salto Angel tiene ese nombre, en honor al hombre que lo descubrió en 1937, el aventurero y aviador norteamericano Jimmy Angel. Sin embargo, los indígenas de la zona, los Pemones, ya lo conocían anteriormente y lo habían bautizado como Churún Merú. Es la caída de agua más alta del mundo. ¡Me detengo ante tu imagen majestuosa y he sentido esta pasión maravillosa! Eres bella creación, siento lo egregio cuando admiro la emoción del sortilegio y el torrente caudaloso cuyo arpegio nos regala su deidad cual privilegio. ¡Tu cascada desafiante es seductora siempre fluye en su aventura surtidora! Venezuela se deslumbra primorosa, es el salto que conduce al florilegio: que presume su beldad inspiradora.

Mientras al amor convoca (Jotabéa con estrambote)

Instrucción, adiestramiento, lealtad a la enseñanza razones fieles que versan motivos para esta alianza. La educación es cimiente que horizontes multiplica, combate toda ignorancia, con su experiencia edifica e instruye con elocuencia con la verdad que predica la esencia del ser humano que con justicia se aplica. ¡Es cultura, es la semilla que florece con paciencia: ella supera las dudas y alimenta la conciencia! Trae consigo el universo, vehemencia y esperanza, fluyendo va el pensamiento que concilia y rectifica: ¡consagrando voluntades del hacer con la sapiencia! Consolida los principios, su fragor no nos silencia, es auténtica, es genuina, la creadora que invoca: ¡esa misión que se inspira mientras al amor convoca!

Sincero el buen amor (Jotabé con estrambote)

¡Sincero el buen amor que nos ofrece la magia del instante que enternece! Y busca en el edén de su ambrosía la intensa sensación de la armonía, seduce con la tierna melodía: ¡transforma su cortejo en poesía! ¡Es sabio en su carisma y soberano, se entrega por completo, nunca en vano! Cosecha lo que engendra que florece, enfrenta en su bregar la cobardía y alcorza lo genuino y cotidiano. Camina entre las sombras de la mano, comparte lo sublime con su encanto: ¡y abraza en el dolor y en el quebranto!

Y dejan esa estela innovadora

Regresan entre anhelos en su albura leales sentimientos que obsesionan, delatan experiencias que eclosionan y logran desafiar en su armadura. No hay sitio para osadas conjeturas, precisan horizontes que valientes defiendan los pilares suficientes y aquellas mil razones que convocan intensos desafíos que se enfocan y dejan esa estela innovadora. Y dejan esa estela innovadora la grata filigrana que motiva, que inmersa en lo sublime se deriva luciendo su faceta encantadora. Y estrechan sus alianzas protectoras, requieren del hacer siempre genuino que logre  anticiparse al torbellino, que pueda derrumbar las primaveras en tanto condicionan las quimeras que intrépidas y audaces nos inspiran.

Alcorzando sus placeres

Verso amante de mis sueños y el más fiel de mis amigos, cobijas mis acertijos y confiesas mis desvelos. Eres también el maestro que deja huella indeleble, en lo frágil que nos duele  y en lo intenso que perdura eres el que fiel apunta lo que ampara mi  presente. Confrontas los laberintos y entre tantos avatares, regalas los madrigales con azares peregrinos. Eres constante y divino junto a la musa traviesa, que inspiradora y coqueta surte todo mi horizonte dibujando mis visiones, mis anhelos y quimeras. Caballero de mi historia tú compilas desafíos, siempre atento y decidido entre notas te acrisolas. Artesano que tremola al universo que esplende, tus prodigios enriqueces con el hacer de la vida, siempre auténtica y genuina alcorzando sus placeres.

Sabe de tantas cosas

Sabe de la nostalgia mientras invade el recuerdo, es triste la despedida vistiendo el cruel desacuerdo, frente a la indiferencia que se apodera en su andar. Sabe de la tristeza, de la aflicción, el quebranto cuando la pesadumbre echa por tierra el encanto y aglomera su esencia en la desdicha por confesar. Sabe de la amargura, melancolía que duele, busca en la noche densa todo el amor que consuele mientras tanto el sendero abre sus puertas al caminar. Sabe la pena intensa todo el pesar que atribula, larga ha sido la espera en esta ausencia que anula todo el sentir que abraza esa esperanza por alcanzar. Sabe de lo sensible, de la actitud en el desvelo, de la vigilia osada que irrumpe junto al anhelo para llenar sus vacíos y aspiraciones tocar. Sabe de tantas cosas en el azar peregrino, de aquel instante supremo que surte el eco divino mientras fiel persevera en el periplo por completar.

He de brindar

He de brindar por todo lo vivido, por los riesgos, las andanzas, los revuelos, los versos entre azares, los desvelos, la luz de la mañana y el olvido. He de brindar por todo lo perdido, el tiempo con su adarga y con sus duelos, las noches entre letras, los anhelos  y el duro enfrentamiento decidido.  Por todo lo que avanza y enternece, lo tierno que perdura y fraterniza y el gozo del hacer que lo enriquece. También por la pasión que ruboriza, lo justo y lo leal que permanece y el reto que entre sueños moviliza.

Entre bondades y pensamientos

Vuelve la musa cada mañana llena de aromas, libre en su vuelo y apasionada vive el anhelo que le acaricia su tez lozana. Llega entre luces la soberana, súbitamente trina su arpegio siente que late en el verso egregio lo más profundo, tierno y genuino, de lo sublime, de lo divino que hace la magia cual sortilegio. Viene de prisa fiel andariega con la mirada de la esperanza, sigue traviesa en su tierna andanza y entre versales su amor despliega. Con su tintero letras congrega en la avalancha de sentimientos, mientras regala bellos momentos con la osadía de aventurera, que nos ofrece la primavera entre bondades y pensamientos.

El grito de la paz ( Jotabé)

¡Retumba en los confines de la tierra el grito de la paz contra la guerra! El mundo se ha de unir en la esperanza, no debe flaquear la fiel alianza, con muestras de heroísmo la templanza levanta corazones sin venganza. ¡El eco del amor, su melodía  procura en su pendiente la armonía! El puente del abrazo no se cierra  y clama su constancia en la confianza: ¡que besa el porvenir y su ambrosía!

La verdad del hacer (Jotabéa)

¡Mi pluma ha de escribir el curso que del alma  fluye en la intensidad que justa no desalma! Tintero de ese amor que fiel jamás claudica, ni renuncia al andar pues sólo multiplica la confianza en el ser que firme fortifica: ¡la verdad del hacer que al sendero edifica! ¡Nos revela la vida loable premisa, la razón de alcanzar la constancia precisa! Mientras tanto es cobija ese don que nos calma, la palabra hacedora firmeza predica: ¡al poder compartir su genuina sonrisa!

Hoy buscan el remanso ( Jotabéa)

¡Las alas del amor hoy buscan el remanso y ofrecen la verdad que fluye sin descanso! Revuela la esperanza, enfrenta el desafío, la paz clama su esencia: es libre en su albedrío, florece el sentimiento aún en lo sombrío y fiel junto al decoro esplende con su brío. ¡Irrumpe la razón con voz de justiciera, reclama la equidad que augure primavera! Exige su derecho en el sendero manso, sin permitir lo cruel del déspota vacío: ¡dispuesta a perseguir su diáfana quimera!

Verdad del corazón (Jotabé)

¡Verdad del corazón hoy nos delata nos tienta entre sus redes y nos ata! Sincera lealtad que con su arpegio seduce cual la luz de un sortilegio, magnífica nos brinda el privilegio de hacer de cada azar un florilegio. ¡Legítimo el andar siempre evidente que impetra su firmeza vehemente! Real la aspiración siempre inmediata que surte lo mirífico, lo egregio: ¡venciendo lo nefasto y displicente!

Siempre oportuna (Jotabé)

¡Mostrando el gran amor que no traiciona se entrega lo esencial que nos perdona! Y es bello cultivar tiernas pasiones sintiendo que se arrullan corazones, beber la intensidad, las emociones con esa libertad: ¡sin objeciones! ¡Haciendo del cariño la fortuna que irradia plenitud como ninguna! Genuina esa bondad que no abandona que sabe trascender las intenciones, auténtica, vital: ¡siempre oportuna!

Ofrendas que bendicen junto al Verbo

Guiados sabiamente por la estela la gloria del amor hace la luz, la vida sublimando la virtud consagra la bondad con vehemencia. Bendice paso a paso cada huella la fe  que surte toda su fragancia, aquella que confirma la esperanza de fuertes corazones sin cadenas, clamando en los confines de la tierra la paz en el poder de la palabra. Ofrendas que bendicen junto al Verbo elevan con sapiencia una plegaria. La mirra, incienso y oro en su bonanza  agitan esa fe que no claudica. Osada persevera en la justicia, la alianza en la humildad que silenciosa inspira en la verdad conciliadora, se goza en lo supremo, en lo sagrado, pues sabe perdonar desde el Calvario mostrando el gran amor que no traiciona.

Comenzar en la esperanza

De nuevo un comenzar en la esperanza hablando desde el alma con la pluma, sumando tantas noches entre dudas sujetas las tristezas y nostalgias. Genuino el reiniciar con tolerancia mirando al universo apasionado, sintiendo el sortilegio en su remanso tomando nuevas riendas entre anhelos, fijando el renacer en su revuelo:  ¡abraza el despertar desde su amparo! Abraza el despertar desde su amparo y enfrenta al deshonor, a la perfidia, al odio y al flagelo de la envidia le muestra un universo pleno y claro. Detesta la malicia del descaro que suele avasallar a la confianza, revela en el empeño y la pujanza la cara victoriosa de la vida, que osada nos bendice y nos convida: ¡de nuevo a comenzar en la esperanza!

Dejando su señal

Podemos superar todos los duelos aún en la tristeza más profunda, lavar con nuestro llanto cada herida vencer la adversidad, tantas penurias, borrando la inquietud y el desconcierto tratando de aclarar miles de dudas, probando nuestra fuerza en el camino atentos de esa luz siempre segura. Irisa el universo su pendiente, es tiempo de alcanzar nuevas victorias, nos llaman pasionales desafíos son tantas las respuestas a las horas, que ocupan nuestros pasos y emociones salvando en la verdad siempre notoria, la intensa vehemencia que revuela y llena de esperanza nuestra aurora. Precisa descubrir nuevos anhelos quemar esa  maldad siempre errabunda, buscar la plenitud en nuestra vida que acabe la oquedad de las injurias, tachando la mentira con lo cierto tomando decisiones bien agudas, haciendo del andar nuestro destino en medio del fragor de la aventura. Consagra  con espíritu evidente cruciales laberintos entre historias, que cubran