En aras del amor

No es magia, es lealtad, amor sincero
y tú sabes muy bien de qué se trata,
no escondo la razón que me arrebata 
en tanto te vislumbro en mi sendero.

Quizás yo te comparta el derrotero
que asumo en esta cápsula inmediata
y sé que la verdad nunca maltrata
aún cuando el silencio es lastimero.

No importa si en el cenit del desvelo
se anide la ilusión de una caricia
con esa libertad que no traiciona.

Y en medio del placer la fiel albricia
revuela con la fuerza del anhelo,
en aras de ese amor que nos perdona. 



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