Luna de mi alma olvidada de estrellas.

Luna solitaria, reina de la noche sin estrellas, orbitando celeste en el silencio

tu espectro de cráteres en sombras, de montañas anulares  y  de seres que acompañan invisibles tu cadencia melodiosa y enamorada.

Surtidora de idilios, cómplice de amores y deseos,

 de fieles añoranzas e infieles devaneos,

robando las miradas y opacando el destello

 de la estrella celosa desafiante de sueños.

Incitas a los mares de la ausencia

a inspirar la excelsa luz de algún poema,

que en vuelo de un romance sin esquemas

anule el  astroblema de mis penas.

Mirando mis ojos tu brillo sin censura, 

y  la sentencia de amor  se extingue ante el dilema,

tu cara que ilumina la visión de mi conciencia

y aquella que se oculta en mantos de tinieblas.

Trasladas tu armonía en eclíptica aventura,

conjurando misterios,  proezas y leyendas, 

 novilunio de encantos que nacen entre  letras

y plenilunio de amores cual fuga de cometas,

que triunfan en la espera sublime del poeta.

Luna, azul te imagino como novia hechicera,

coqueteas al ritmo ancestral del universo, 

confabulas espíritus y almas en su vuelo etéreo ,

y exorcizas designios de malvados intentos. 

Excéntrica conquistas tu esencia lisonjera,

te acercas y te alejas , escondes tu belleza

y cuando radiante brillas como reina altanera,

seduces al crepúsculo como ingenua doncella 

con mareas lunares de asombros y quimeras.

Con tus hilos de plata te paseas serena

invadiéndolo todo con tu aroma de estrella,

y con polvo de luces de odalisca traviesa

impactas en tu fase donde llena te veas,

con corona de reina besada por la tierra.

Luna de mi alma olvidada de estrellas,

inspirastes el silencio de mis versos sin nombre,

y en eclipse amoroso añorando un quijote

conquisté los molinos de penumbra en visiones, 

cuando escribo mirando tu brillo en esta noche.